Buscar pareja por internet, algo natural

Todavía nos seguimos encontrando con frecuencia a gente que “tuerce el gesto” cuando se les plantea la opción de buscar o encontrar pareja por Internet. Para muchos sigue siendo un medio extraño, poco conocido y a menudo asociado a noticias negativas, que tienen que ver con fraudes, engaños o asuntos truculentos.

Si bien es cierto que se trata de un medio relativamente nuevo al que todavía necesitamos habituarnos como herramienta cotidiana, y que también es cierto que todo lo anteriormente mencionado puede darse en la red, no debemos perder nunca de vista que lo mas importante es le gestión que nosotros mismos hagamos del medio, en lugar de dejar que el medio invada nuestras vidas, a veces de manera arrasadora.

Cada vez que se nos plantean estas cuestiones a las personas que estamos desarrollando nuestra actividad laboral o personal a través de  la red, por supuesto, no podemos negar lo obvio, pero lo que podemos hacer es animar a aprender a moverse de una manera fácil, eficaz y, sobre todo, natural. Y una tendencia natural es la que tiene el ser humano para confiar en el otro, ya que todos nos necesitamos para sobrevivir y la desconfianza suele ser sintomática de sociedades desestructuradas. Y con esa confianza es con la que muchas personas entran a relacionarse en la red.

También es cierto que lo ideal seria creerse todo lo que nos cuentan, pero el abanico de personas con que nos vamos a relacionar es tan amplio y tan variable que lo mejor es comprobar que el mensaje que envía el emisor es el mismo que el que recibe el receptor. Por ejemplo, todos sabemos decir tengo frío. Pero, objetivamente, no todos estamos diciendo lo mismo. Para unos, frío  será estar a 8ºC, y para otros será estar a 18ºC. ¿Quién miente? Ninguno de los dos. Tienen aprendizajes o percepciones distintas, que hay que saber expresar o saber interpretar, para finalmente decidir si se adapta a lo que estamos buscando o a lo que queremos.

Resulta importante entonces liberarnos de la esclavitud y el mal rollo de estar emitiendo continuamente juicios de valor. Si algo no nos resulta creíble, o no se adapta a lo que queremos, con toda naturalidad daremos carpetazo al asunto y pasaremos al siguiente, pues ese es el objetivo fundamental de intentar un medio como Internet para relacionarse con otras personas, y aumentar las probabilidades de encontrar a esa persona que pueda ser nuestra pareja, momentánea o definitiva.

Por lo tanto, la naturalidad consistirá en

–       moverse por la red como quien se mueve por su barrio

–       prestar atención a las personas similares a nuestros objetivos, e ignorar todo aquello que nos produce incomodidad

–       no entrar en juicios de valor, admitiendo que en la red hay gente para todo, pero que la decisión de admitirlo es personal e incuestionable

–       sentirse eficaz poniendo un instrumento como es la red al servicio de nuestra calidad de vida, y no al contrario.

 Lo artificial de la red es perder la perspectiva humana que es básica para las relaciones y, en la medida de lo posible, fomentaremos que los intercambios en la red estén fundamentados en el conocimiento personal del otro, de manera que moverse por Internet resulte tan natural y cotidiano como bajar al pub, ir al cine, o acudir a un encuentro a reunirse con amigos. 

Es posible que nos de algo de vergüenza que se vea explícitamente que estamos buscando pareja por Internet pero, ¿quién no quiere estar enamorado?¿quien no acude a sitios para ver si cae la breva de encontrar a ese alguien especial? La red es una gran oportunidad, cotidiana en nuestros días que, utilizada con eficacia y naturalidad, aporta grandes ventajas que sugerimos no desaprovechar.

Colaboración de Mila Cahue para MeeticAffinity