Observa el siguiente video…
Más adelante te comentaremos a qué debes de prestar atención, pero, primero, comprende bien qué es, y para qué sirve:
Nuestras capacidades cerebrales son herramientas de las que disponemos, pero que normalmente desconocemos cómo funcionan y cómo se pueden poner a punto.
De todos los estímulos que nos rodean, el cerebro, ante su incapacidad
de procesar racionalmente todo a la vez, necesita hacer una selección de lo que sea más relevante en un momento determinado, y para ello utiliza la ATENCIÓN. Normalmente, nuestra atención funciona de forma automática, pero podemos aprender a dirigirla, como el periscopio de un submarino, a la parte de la realidad que decidamos en cada situación.
Si hemos aprendido a llevar nuestra atención inconscientemente a estímulos negativos (gente desagradable, eventos tristes, cosas feas, etc.) nuestro estado de ánimo y las decisiones que tomemos, estarán en consonancia con la parte de la realidad en la que nos estamos recreando. CONSCIENTEMENTE, podemos aprender a llevar nuestra atención a otros estímulos más positivos, creativos o adecuados para cada situación de LA MISMA REALIDAD.
Ahora, vuelve a ver el vídeo… y observa las diferencias.